Una empresa entendió que había llegado el momento de cambiar el estilo de gestión y contrató un nuevo gerente general, el que vino con la determinación de hacer cambios y volver a la empresa más productiva.
El primer día, acompañado por sus principales colaboradores, hizo una inspección en la empresa. En la planta todos estaban trabajando, pero un muchacho estaba recostado contra la pared con las manos en los bolsillos.
Viendo una buena oportunidad para dejar bien clara su filosofía de trabajo, el nuevo gerente le preguntó al joven:
-¿Cuánto gana usted por mes?
- Doscientos mil, señor, ¿por qué? - respondió el muchacho sin saber de qué se trataba.
El gerente sacó $300 del bolsillo y se los entregó al joven, diciendo:
- Aquí está el sueldo de este mes. Ahora desaparezca y ¡no vuelva nunca más!
- El joven guardó el dinero y se fue, de acuerdo a las órdenes recibidas.
El gerente entonces, orgulloso, pregunta a un grupo de operarios:
- ¿Alguno de ustedes puede decirme qué hacía ese joven?
- Si, señor - respondieron atónitos los operarios - Vino a entregar una pizza...
Moraleja: Hay personas que tienen tantas ganas de mandar, que se olvidan de pensar.
El Director General de un banco se preocupa por un joven supervisor estrella, quien después de un período de trabajar a la par con él, sin parar nunca a almorzar, se empieza a ausentar al mediodía.
Llama al detective privado del banco y le dice:
- Siga a "González" un día entero, no vaya a ser que ande en algo vidrioso.El detective cumple con el cometido, vuelve e informa:
- González sale normalmente al mediodía, toma su auto, va a su casa a almorzar, luego le hace el amor a su mujer, se fuma uno de sus excelentes cigarros y vuelve a trabajar.
- Ah, bueno, menos mal, no hay nada malo en todo eso - responde el director-
- ¿Puedo tutearlo, señor? - pregunta el detective.-
- Sí, como no.- Responde sorprendido el Director.
- Repito: González sale normalmente al mediodía, toma tu auto, va a tu casa a almorzar, luego le hace el amor a tu mujer, se fuma uno de tus excelentes cigarros y vuelve a trabajar .
Moraleja: Ojo con las malas interpretaciones.
Había dos hombres charlando en un bar y uno dice al otro:
- Tengo un jefe genial.
- ¡Qué bien, Gerardo! ¿Qué hace?
- Se pasa todo el día durmiendo.
- ¿Y tú, que haces?
- ¡Lo Ayudo!
Moraleja: Aqui no hay. Ese jefe es Superman (no existe en realidad)
Hace muchos años, cuando el cuerpo humano fue creado, todos los órganos se reunieron para determinar cuál de ellos sería el JEFE.
El cerebro, lleno de orgullo dijo: "Yo pienso y controlo, debo ser el JEFE".
Los pies dijeron: "Nosotros somos el sostén del cuerpo, así que debemos ser los JEFES".
El corazón dijo: "Sin mí no habrá vida, así que el JEFE tengo que ser yo".
Y así, cada uno de los órganos del cuerpo fue exponiendo sus razones sin llegar a ningún entendimiento.
Finalmente, habló el culo: "Yo quiero ser el JEFE pues yo también soy importante".
Todos ser rieron y se burlaron del pobre culo, y éste, lleno de rabia, decide declararse en huelga.
Fue tan terrible lo que ocurrio con la Huelga del Culo, que muy pronto el cuerpo se enfermó. Le dio fiebre, el corazón y los pulmones luchaban por funcionar, y poco a poco el cuerpo fue llenándose de todo eso que el culo se negaba a expulsar.
Ante el desastre, decidieron convocar una reunión de urgencia, en la cual el culo fue nominado JEFE de todos los órganos y así se pudo volver a la normalidad.
Moraleja: Para ser Jefe no hace falta tener cerebro, sino Culo para saber cagarse en los demás.
Conclusión: Cualquier Culo puede ser Jefe y cualquiera de tus Jefes puede ser como el Culo.
Recomendación: No le enseñes este papel a tu Jefe porque te pateará el Culo.
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Hace 8 años
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